La primera opción es el laminado plástico decorativo Formica que sin duda es el material más resistente y fácil de limpiar, además de ser la alternativa más económica por lo que resulta ser el material más utilizado dentro del mundo de la cocina. Este mismo material puede ser utilizado en las paredes, un peto en la zona donde se lleva a cabo la cocción o como antepecho (la pared entre la cubierta y los gabinetes). Esta alternativa además de resultar estética, es muy higiénica ya que no hay juntas como en el caso del azulejo.
Formica ofrece una gran variedad de acabados, colores y texturas que permiten una infinita gama de posibilidades y combinaciones.
Además Formica tiene un equipo de diseño que busca, estudia, analiza e interpreta las tendencias en colores, materiales, patrones de cada mercado y los traduce en diseños de laminados plásticos específicos para cada país. Sabemos que México prefiere los colores claros, brillantes y texturizados. Así que cuando decidas cambiar tu cubierta de cocina asegúrate que el laminado sea Formica, la marca original.